¿Qué es Aze Shiatsu, cómo nace? ¿Cuáles son sus diferencias con el Shiatsu Namikoshi? ¿Cuáles son las necesidades del Shiatsu para el público Occidental? Hoy nos centramos en responder a estas preguntas, acompáñanos en un viaje que comenzó hace más de 40 años, de la mano del Maestro Onoda.
Namikoshi y Aze
Tokujiro Namikoshi fue quien, no sólo, dio forma a una terapia que recogía una larga tradición milenaria nunca estructurada, sino que consiguió que las autoridades niponas reconociesen la terapia Shiatsu a mediados del siglo XX. En los últimos 30 años, algunos de los discípulos del maestro Namikoshi han viajado fuera de sus fronteras para difundir el Shiatsu por todo el mundo, entre ellos Shigeru Onoda.
El maestro Onoda llegó a España en el año 1984 y a partir de ese momento, y trabajando con una media de ocho pacientes diarios, desarrolló lo que hoy conocemos como Aze Shiatsu.
Aze Shiatsu tiene su base en el Shiatsu Namikoshi y utiliza la misma técnica y forma de presión. Además, el recorrido básico es prácticamente el mismo; se han añadido algunas regiones y/o punto que complementan al estilo Namikoshi. De hecho, Onoda es el máximo representante de Aze Shiatsu en Europa.
Cuando el Shiatsu fue creado, a nivel técnico, contemplaba solamente la presión con los dedos posteriormente Aze Shiatsu ha incorporado dentro de su estilo la alineación de las vértebras, los ejercicios para mantener y/o aumentar la flexibilidad y mejorar la postura.
Actualmente, el Shiatsu en Japón se centra más en la enseñanza de la técnica de presión con los dedos. Aze Shiatsu elabora un Shiatsu adaptado a las necesidades de los occidentales. Mantiene la esencia de terapia para el mantenimiento de la salud, pero atendiendo a las necesidades que plantea el estilo de vida de la sociedad del siglo XXI.
A través de la mejora de la estructura corporal, de la presión adecuada al Kyo – Jitsu, del trabajo sobre los “puntos aviso” y los “puntos Aze”, ha desarrollado su técnica derivada y mejorada del Shiatsu original. Los fundamentos de Aze Shiatsu se vienen plasmando en diferentes publicaciones a lo largo del tiempo y han sido dadas a conocer al gran público en multitud de conferencias y congresos tanto nacionales como internacionales.
La Escuela Japonesa de Shiatsu en España lleva desde el año 1990 impartiendo la enseñanza de Shiatsu para formar terapeutas profesionales. Anteriormente ya lo había hecho, pero mediante una enseñanza privada menos estructurada.
A través de la asociación internacional Namikoshi Shiatsu Europa ha realizado cursos de Shiatsu Namikoshi y ha formado instructores para el mantenimiento y la difusión del auténtico Shiatsu japonés.
Maestro Onoda, Shiatsu para occidentales
Lo primero que el maestro Onoda comprendió al llegar a España fue la diferencia entre el mundo oriental y el occidental. No sólo las costumbres y el modo de vida seguían parámetros distintos, sino que el occidental y el oriental diferían tanto en su estructura corporal como en su relación con la terapia manual y sus expectativas.
Diferente estructura corporal
Es indudable que la estructura ósea de ambas razas es diferente. Mientras los orientales tienen una columna vertebral con curvas fisiológicas atenuadas, los occidentales presentan curvas más acentuadas, sobre todo lordosis lumbar. La manera de moverse en la vida cotidiana, el uso del cuerpo también es diferente. Por eso el 20% de los occidentales padece hernia discal frente al 2% de los japoneses. Otra consecuencia es la fragilidad del cuello de los occidentales frente al de los nipones; la mayoría de las personas presentan la musculatura del cuello excesivamente tensa, lo que puede originar: dolor de cabeza, migrañas, tortícolis, etc.
Los hábitos de vida son, también, muy diferentes. En occidente no hay tradición de mantener el cuerpo sano. Sólo el deporte, que además es practicado por un porcentaje bajo de personas, en muchas ocasiones provoca más problemas que beneficios.
Diferencias en la alimentación
El cáncer colorrectal tiene más prevalencia en la sociedad occidental frente al cáncer de estómago que es más frecuente en Japón. Probablemente por la ingesta de colesterol y grasa animal. La tolerancia al alcohol también es diferente. Queda claro que ambos organismos responden de manera diferente.
En conjunto, todos estos puntos hacen que los problemas que aquejan a unos y otros a lo largo de la vida sean diferentes, tanto a nivel físico como emocional. Por eso el tratamiento debe ser personalizado.
Diferentes expectativas
Aunque la sociedad occidental avanza en este sentido, su relación con las terapias alternativas o complementarias, y particularmente con el Shiatsu, es muy diferente que la del ciudadano oriental. El Shiatsu, como cualquier otra terapia oriental, surge como terapia preventiva y de mantenimiento de la salud. Las personas acuden regularmente a recibir su terapia sin esperar a estar enfermos; buscan mantener su organismo en equilibrio para afrontar mejor cualquier pérdida de salud. En occidente acudimos al médico sólo cuando estamos enfermos, y la medicina sólo trata a aquellos que están enfermos; la medicina preventiva no existe.
Además, el paciente pone su salud en manos de terceros, en este caso el médico. No hay tradición de mantenimiento propio de la salud.
Por otro lado, el paciente occidental está acostumbrado a acudir al médico que le receta un medicamente que, en la mayoría de los casos, elimina el síntoma rápidamente. Parece que eliminando el síntoma se elimina el problema de fondo. Además, no relacionan mente-cuerpo y su actitud mental previa no es la más adecuada.
Además, no relacionan mente-cuerpo y su actitud mental previa no es la más adecuada. Por otro lado, hay que entender que el Shiatsu Namikoshi realiza un trabajo “profundo” holístico con la intención de encontrar la raíz del problema y ayudar a su solución. Por lo tanto, los efectos terapéuticos, en algunos casos, no son inmediatos.
Entonces Onoda, al llegar a España, se encuentra con todas estas situaciones. El Shiatsu que conoce hasta ahora no es suficiente para atraer pacientes. Decide investigar y mejorar su Shiatsu.
Como dice el maestro Onoda: “Definitivamente, el Shiatsu Namikoshi surge para los japoneses, por eso desarrollamos Aze para los occidentales”.
Aze Shiatsu y los puntos Aze
La medicina china está muy ligada a la sociedad nipona. Aún sin conocer los planteamientos básicos de esta medicina, algunos de sus principios están tan arraigados que la gente realiza “prácticas médicas” todos los días sin saberlo: un remedio casero para el resfriado, una presión o fricción en una zona dolorida. Los puntos Ashi para la medicina china son puntos localizables en el cuerpo que se vuelven reactivos o hipersensibles cuando existe algún tipo de desequilibrio orgánico. En japonés se llaman puntos Aze. Estos puntos no pertenecen al recorrido de los canales energéticos que forman el entramado del que habla la medicina china; pueden localizarse en cualquier parte del cuerpo y se utilizan diferentes métodos de tratamiento.
Onoda incorpora a su Shiatsu el trabajo sobre estos puntos. La práctica diaria durante tantos años ha demostrado que es posible mejorar el tratamiento presionando más allá de las regiones y puntos del recorrido básico. Uno de los objetivos del practicante de Aze Shiatsu es localizar estos puntos particulares de cada paciente y presionarlos para corregir sus desequilibrios.
En Aze Shiatsu se habla de puntos clave y puntos Aze. Todo futuro terapeuta de Aze Shiatsu debe tener claro la diferencia entre ellos:
– Los puntos clave son puntos importantes para el tratamiento de algunos desequilibrios. La mayoría son puntos estrechamente relacionados con puntos de acupuntura y se utilizan en situaciones parecidas. Otros son puntos de experiencia y de probada eficacia en el trabajo con Shiatsu, definidos y localizados después de más de veinticinco años de trabajo.
– Puntos Aze es la manera japonesa de denominar a los puntos ashi a los que hace referencia la medicina tradicional china. Los puntos ashi no tienen nombre ni ubicación específica, se localizan en zonas dolorosas cuando existen desequilibrios internos.
Los puntos clave se identifican siempre según la localización tradicional de la acupuntura, pero el trabajo de Aze Shiatsu exige buscar el punto sensible de manera exacta. En muchas ocasiones coincide con la localización anatómica que aporta la medicina china, pero en otras tantas no. Con los puntos Aze ocurre lo mismo. Es necesario desarrollar la sensibilidad necesaria para percibir dónde se encuentran estos puntos para presionarlos con efectividad.
Ver libro Aze Shiatsu. Tratamiento Básico (pag.21).
La necesidad de un tratamiento estándar
“La experiencia con mis pacientes y los años de investigación y estudio me han enseñado que en Aze Shiatsu hay tener un tratamiento estándar a seguir que debemos respetar. Sobre éste luego, podemos ir ampliando y agregando manipulaciones y distintos katas de acuerdo con las patologías que vayamos encontrando”
En Aze Shiatsu es muy importante un orden de trabajo. Éste permite que la terapia logre.
Entradas relacionadas:
Aún no hay comentarios, ¡añada su voz abajo!